Blog Superstar
Mientras unas tuvieron una granja en África, yo tuve un blog con mogollón de visitas. Hasta que, por fin, conseguí cargármelo. Ahora tengo cero comentarios. Es lo bueno. Porque a lo mejor un día, de pronto, tengo uno, y me tiro una semana leyéndolo. Lo malo es cuando tengo 8. Entonces, me descoloco. Me siento como si hubiera nacido para casarme y llevar bisutería.
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7 comentarios:
Yo si llego a ocho ya se me hincha la autoestima.
Echo de menos alquel blog superstar, pero oye, que éste va por buen camino eh!
Toma, otro comentario. Ya tienes para dos semanas.
Que ser Superstar es muy cansado.
Tengo una palabra para ti: refanfinflamiento. Con esa palabra en mente, va todo como la seda siempre.
Sí, Te entiendo. El día que mi ex me hizo 8 comentarios, le pedí el divorcio.
Creo recordar que en el primer post del blog superstar en el que comenté los comentarios llegaron a sesentaypico, o a ochentaytantos, ahora no lo recuerdo muy bien, hace ya un tiempo de eso. Era un post sobre el cierre de un viejo restaurante italiano, y disfruté inventando un final para el microcuento que habías inventado. O quizás ese fue mi segundo comentario, diría que el primero fue en un post mucho más personal, uno con el que me identifiqué plenamente y al que debí de responder con un comentario mucho más sencillo. Vamos, que blog superstar o no, aquí queda otro comentario. Bisutería, qué palabra más fea.
a mí en cambio me interesaron más tus grietas, evas y escombros.
no sé por qué, pero la palabra que me sale para ti es lúcida. y supongo que tú te partes.
sigue.
qué bonito comentario, mil gracias
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